«Schroders es un banco que gana millones. No entiendo cómo pueden explotar a sus trabajadorxs de esta manera. Y si se niegan a restablecer el equilibrio, estamos listos para ir a la huelga. La mayoría del personal de limpieza de la empresa se ha unido a UVW porque sabemos que este sindicato nos apoya y respalda nuestras demandas.»

Victor Vargas, limpiador y representante de UVW

Lxs limpiadorxs subcontratadxs trabajan para el banco de inversión multinacional Schroders a través de la contrata Peartree. Mientras con su esfuerzo mantienen las oficinas del banco en el centro de Londres impolutas, a ellxs la empresa les lleva al límite.

Están agotadxs y sobrecargadxs porque los recortes de personal les han obligado a hacer el trabajo de dos o tres personas.

«¿Por qué han despedido a aproximadamente 10 personas, aumentando la carga de trabajo para quienes quedamos? Antes éramos alrededor de 35 y ahora sólo quedamos 25. Esto es abuso laboral y por eso estamos luchando. Estamos trabajando el doble que antes. Y me pregunto, ¿dónde está el dinero que han ahorrado al reducir el personal?» explica Víctor Vargas, limpiador y representante de UVW.

Además, los pagos salariales a mitad de mes están causando dificultades económicas y la total falta de transparencia sobre los cambios en la carga de trabajo ha hecho que un empleo ya exigente sea aún más insoportable.

Schroders es un banco millonario, pero sus limpiadorxs están sobrecargados porque se niegan a proporcionar el personal necesario. En 2024, los activos totales del banco alcanzaron un récord de £777.4 mil millones, con flujos netos de £1.6 mil millones en los primeros nueve meses, nuevos negocios por £3.9 mil millones y ganancias antes de impuestos de £276.3 millones. Por su parte, Peartree presume de una facturación anual de £28 millones.

Está claro que ambas empresas pueden permitirse contratar a más limpiadorxs, pagarles de manera justa por todo el trabajo que realizan y garantizar que sus salarios se paguen con puntualidad a principios de mes.

Lxs trabajadores están listos para votar a favor de la huelga si las negociaciones no logran los cambios que necesitan.